miércoles, 26 de enero de 2011

Prohibido fumar

Prohibido fumar; pues vale, pero que entonces no me vendan el tabaco. Resulta que me lo venden, yo lo compro y estoy obligado al hacerlo a pagar unos impuestos determinados, es decir, yo cumplo con mis obligaciones, quiero entonces, que se me otorguen los derechos correspondientes al cumplimiento de mi obligación.
Es que es malo para la salud; claro, y los coches contaminan y no les prohíben circular; ellos también cumplen con la obligación de pagar su impuesto correspondiente y reciben en contraprestación el poder circular (y recuerdo que todos respiramos sus humos); y la bebida alcohólica también daña la salud, pero no prohíben beber en los mismos sitios en los que prohíben fumar.
En la radio escucho que no permiten rodar, emitir o grabar imágenes en las que se pueda ver un cigarrillo ya sea encendido, apagado o en manos de alguien; cigarros no veremos, no, pero sí podemos ver en la televisión a alguien metiéndose un pico o pegándose de puñetazos con otro, o matanzas a disparos... también es malo para la salud todo eso, pero se permite, no se prohíbe su emisión.
Como eso, otras cosas, ¿hipocresía?, ¿demagogia?, vamos, venga ya... más bien, tonterías.

viernes, 14 de enero de 2011

Un Taxi en la noche...

Hoy hace frío, o quizá es que yo lo tengo metido en el cuerpo y no sé cómo sacarlo de encima, no, de verdad que hoy hace frío; sólo el chasquido que la emisora hace sonar en el micrófono, que cuelga del salpicadero como aferrándose a una última oportunidad, me acelera el corazón para empujar latidos de sangre caliente que hace elevar mi temperatura … a ver para dónde piden móviles libres, a ver si puedo otorgarle esa oportunidad a ese micro que me la pide mirándome fijamente con su lucecita verde … mierda … es para Cervantes y yo estoy en Isabel La Católica … pero si he pasado por ahí hace un momento, y pienso en que se me podía haber ocurrido parar allí, pero es que estaba tan oscura la parada … por eso no paré … estaba tan oscura … bueno, a lo mejor me entra un despacho … ya me toca ser el primero, ahora no quiero el despacho … el que entra es un cliente, buenas noches, por decir algo, y pienso en que ya veremos si lo son, porque vuelve a hacer frío, y sentado en el coche enfrente de un volante y viendo la vida pasar detrás del cristal del parabrisas se nota como que el frío es más intenso … huele raro, ¿qué es?, el cliente ha cenado en un chawarma de esos o un kebap, qué más da, huele raro, fuerte y ácido; voy a respirar despacio y no muy profundamente, no soporto ese olor, ni ese ni el del que se ha pasado bebiendo cerveza … voy a abrir un poco la ventana para renovar el aire del interior del coche, pero hace frío, tengo que cerrarla ya, hace frío … al menos el tipo este no va demasiado mal vestido y no tiene malas pintas, no pido buena suerte con él, sólo que no se mala, sólo pido la misma educación y el mismo respeto que yo le voy a ofrecer a él … ya llegamos a la última del 1, la carrera no ha estado mal, pero es que huele tan raro … ya he dejado de pensar y de plantearme si esto está bien pagado porque lo que está claro es que sí está bien cobrado, el taxi no es barato y la crisis aprieta … la puta crisis … y encima, sigue haciendo frío … por aquí va a ser muy difícil que alguien me ponga la mano … como no sea que hable la niña de la emisora y pida libres para Padre Claret o para Periodista o para el Cerrillo … qué va, no ha habido suerte, de todos modos siempre contestan los de Autobuses … qué parada tan aburrida … salgo verde del Polígono y con las ventanillas abiertas para que vuele ese olor … ese olor, joder, si es que no se va, o lo tengo yo impregnado dentro de la nariz … Alcampo, Trauma, Antigua cárcel, la Plaza de Toros, el cruce con Constitución … ¿qué hago?, la Caleta o Hacienda … me voy a la Bandera, al menos allí hay más luz y no suelo tardar mucho en salir … a ver si llego a 100, 20 para los seguros, 30 para mí, 50 para el jefe, 100, por lo menos 100, tengo que llegar a 100, si es más mejor, pero al menos 100 … voy a cerrar las ventanas, que fuera sigue el frío … una chica abre la puerta, no mujer, esa no, que no me gusta que se me pongan delante, al lado, pero si no nos conocemos de nada, es igual, ya se ha sentado, no hace falta que me queje por qué se ha puesto ahí, el cliente siempre lleva la razón … no habla, ¿ves?, ¿para qué te sientas delante si ni siquiera vas a pronunciar una palabra?, … mejor que no hable, no me interesa escuchar penas, casi todo el que habla con el taxista es para contarle desgracias, problemas, pocos chistes, alguna gracia, ninguna alegría … carrera corta, la mínima, bueno, menos es nada, muchos pocos hacen un mucho … a ver si llego a 100, tengo que llegar a 100 … durante el trayecto solo se oían las ruedas raspando el asfalto, los baches sacudiéndonos el alma a saltos, no se oyó la voz de la emisora, se oyó la radio sonar música indefinida, monótona, asinfónica, era Jazz, claro, Radio 3, a veces ya no cambio ni el dial, sólo lo muevo para mí cuando no quiero escuchar música, sino sentirla … ya amanece, nos vamos, y no es la Cadena Ser, ya se ve la luz del día, y casi me pongo triste … si no fuera porque hoy hace frío…